La cigarra y la hormiga - cuento en inglés
El cuento de "La Cigarra y la Hormiga" es una fábula clásica atribuida a Esopo, aunque también ha sido adaptada por Jean de la Fontaine y otros autores a lo largo de los siglos. La historia presenta a dos personajes principales: la hormiga, que trabaja diligentemente durante el verano almacenando alimentos para el invierno, y la cigarra, que pasa el verano cantando y disfrutando sin preocupaciones.
La moraleja de esta fábula es la importancia del trabajo duro, la previsión y la responsabilidad, así como la necesidad de no subestimar las consecuencias de nuestras acciones. La historia nos enseña que es importante ser diligentes y prepararse para el futuro en lugar de vivir en el presente sin preocupaciones.
Existen otras fábulas famosas como el de La tortuga y la liebre o El patito feo.
La cigarra y la hormiga en inglés (The Ant and the Grasshopper)
Once upon a time, in a beautiful forest, there lived a busy little ant and a carefree grasshopper. The ant, named Andy, was always working hard, collecting food and preparing for the winter. He would march back and forth, carrying grains of wheat and seeds to his home, making sure he had enough to eat when the cold season arrived. The grasshopper, on the other hand, named Greg, loved nothing more than to hop around the forest, singing and playing his violin all day long.
As summer turned to autumn, Andy continued his diligent work, while Greg continued to enjoy himself, paying no attention to the changing seasons. "Why do you work so hard, Andy?" Greg would ask, as he danced around the ant. "Come and join me! The weather is fine, and the sun is shining. There's plenty of time to work later!"
But Andy would just shake his head and reply, "I must prepare for the winter, Greg. If I don't collect enough food now, I'll go hungry when the snow comes."
Greg would laugh and wave his violin. "Winter is ages away, Andy! Don't worry so much. Live in the moment, like me!"
And so, the days passed, and the forest grew colder. One morning, as Andy was busily storing away his last grains of wheat, he heard a faint sound. It was Greg, shivering and hungry, standing outside his door.
"Please, Andy," Greg pleaded, his violin dangling sadly from his side. "I have no food and nowhere to go. Will you help me?"
Andy felt sorry for his friend and invited him inside. He shared his food with Greg, warming him by the fire and making sure he was comfortable. From that day on, Greg learned the value of hard work and preparation, and he vowed never to take things for granted again.
And so, dear friend, the ant and the grasshopper became the best of friends, each learning from the other and living happily ever after in the forest.
That's the story of the ant and the grasshopper, teaching us the importance of hard work, responsibility, and looking out for one another, no matter what the season may bring.
La cigarra y la hormiga en español
Había una vez, en un hermoso jardín, una hormiga llamada Hilda y una cigarra llamada Carlos. Hilda era una hormiga muy trabajadora y siempre estaba ocupada recogiendo migajas de comida y almacenándolas en su hormiguero para el invierno. Mientras tanto, Carlos, la cigarra, pasaba sus días cantando y bailando bajo el cálido sol del verano, sin preocuparse por el futuro.
Un día, mientras Hilda trabajaba duro llevando una gran migaja de pan hacia su hogar, se encontró con Carlos, quien estaba cantando alegremente. "¡Hola, Hilda! ¿Por qué trabajas tanto? ¡Deberías relajarte y disfrutar del hermoso día de verano!", exclamó Carlos.
Hilda sonrió y le respondió: "Estoy ocupada preparándome para el invierno, Carlos. Necesitamos almacenar suficiente comida para sobrevivir cuando llegue el frío". Pero Carlos solo se rió y continuó cantando, sin preocuparse por el futuro.
Los días pasaron y el verano llegó a su fin. Las hojas de los árboles comenzaron a caer y el clima se volvió más fresco. Hilda seguía trabajando diligentemente, recolectando alimentos y preparándose para el invierno. Mientras tanto, Carlos se encontró sin comida ni refugio cuando el frío del invierno llegó.
Con el estómago vacío y temblando de frío, Carlos se acercó a Hilda en busca de ayuda. "¡Hilda, por favor, ayúdame! Me he quedado sin comida y tengo mucho frío", suplicó Carlos.
Hilda, que había sido previsora y había ahorrado durante el verano, sintió compasión por Carlos. "Por supuesto, Carlos. Siempre es mejor trabajar y prepararse para el futuro", le dijo amablemente Hilda, compartiendo generosamente parte de su comida con él.
Desde ese día, Carlos aprendió la importancia del trabajo duro y la previsión. Se disculpó con Hilda y prometió ser más responsable en el futuro. Juntos, Hilda y Carlos pasaron el invierno, compartiendo alimentos y abrigo, y desde entonces se convirtieron en buenos amigos.
La moraleja de esta historia, querido amigo, es que es importante trabajar duro y prepararse para el futuro, en lugar de vivir solo el momento presente sin preocupaciones. ¡Así que recuerda siempre ser como Hilda, la hormiga diligente y previsora!